Y como yo siempre te hago caso, Ng, me puse a mirar Desperate Housewives, siguiendo tu recomendación. Y como soy así rápida de mente (y también un poco de bombacha) de golpe asocié una línea del dialogo, con la línea del mensaje de texto que recibiste hoy.
Otra veeeeez? Diras vos, dirá nuestro querido publico (que me pregunto si realmente existe) otra vez nena con los mensajes de texto! No no, te equivocas. Me quiero referir ahora al contenido del mismo, o mejor dicho, al poco contenido. O más aun a, que tienen los hombres para decir?
Mensaje de texto: hola
Dialogo en DH (contexto: discusión en la mesa familiar)
Mujer: Seeing that you are the head of this household I would really appreciate it if you could say something!
Hombre: Pass the salt?
He aquí, dos claros ejemplos. Estas simples criaturas, que de cuando en vez nos gratifican prestándonos sus dingalingues por algunos minutos (si si, ya se ya se, 13 polvos fueron más que algunos minutos, esta vez no vamos a contar las excepciones) no tienen más que pocas palabras correspondientes a su poco vocabulario, que muy pocas veces son unidas en una oración, y ni soñar con una subordinada, oh no!
Y nosotras, que no estamos exentas de pecado y entonces no tiramos la primera piedra, podemos pasar horas analizando un mensaje de texto que decía: hola, o algún otro que decía: :(, no wait, that wasn’t even part of any spoken language!
Que decís Ng, que decís vos de esto que dicen (o no dicen) los hombres?
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4 comentarios:
Mirá, te viá ser sincera te viá. Para mí, siempre, siempre, terminan siendo tú mach. Mensajitos, correos, llamadas, basta, basta de la palabra, de explicar, de arguüir, de intentar comprender. La gran mayoría terminan siendo pesados como ellos solos.
Fijate este ejemplo de Entrepreneur (ése es el nombre que le voy a dar por ahora). Nosotras charlamos de ese texto. Hello. Sí, nada, qué sé yo, que me querés decir, qué le respondo. Yo, que soy mal llevada, no le respondí nada. Hoy encuentro otros tres textos y un email, explicando que ha estado viajando, que le encantaría verme, que cuándo me contestaste me llego recién to correo, que que que. Naaaa. Me estás cargando. Eso es tú mach, y encima desorganizado. Esperá y me mandás un correo que dice a) b) c) y d) y listo.
Bueno, supongo que en este sentido, el único que no me hinchó las gomas con tanto textito y correo es el profe. Epa, punto pal profe. No?
Ah, y empecé a preparar mi catálogo de los nabos, pero quiero ver si me consigo la Ilíada, como para tomar ejemplos de ahí. La lista es más larga que cola pa la jubilación, sabés. Y entre tanta oferta, ni uno que valga el peso con cincuenta para lavar las sábanas.
Para Dinga, de una amiga de Ng desde el más allá del atlántico, unas palabras facilitadas el mismo día en que apareció esta entrada en este venerado blog (que hay público, lo hay, canejo!)por otra amiga. Creo que tanta coincidencia sólo puede significar algo: ¡estamos todas en la misma (o en una muy parecida)!
A woman in her thirties is at home happily jumping unclothed, on
her bed and squealing with delight. Her husband watches her for a while and asks, 'Do you have any idea how ridiculous you look?
What's the matter with you?' The woman continues to bounce on the bed and says, 'I don't care
what you think. I just came from having a mammogram and the doctor says that not only am I healthy, but I have the breasts of an 18-year-old.' The husband replies, 'What did he say about your 42-year old arse? ''Your name never came up,' she replied
Mirá, Dinga, viá ser buenita y contestarte de manera que los hombres salgan bien parados (que si no pa' que los quiero). Por ahí el Hombre Soltero (y aquí quiero decir el género masculino singular) vive atrapado en un lugar de actividad en esta cultura occidental. En sus manos está todo: su futuro, el de su familia, su economía, su estabilidad. Tanto tienen que preocuparse y pensar y planificar (como bien vimos vos y yo con nuestros respectivos Jota y Bisnisman, que se llenan la boca con sus propiedades materiales y las preocupaciones que les conllevan) que llegado el punto de la relación físico-material quieren tirar la chancleta. Quizás ha llegado un punto en el desarrollo del Hombre Soltero (y aquí me refiero a la humanidad sin otros significante) en el que el rol activo ha de tomarlo la mujer. Ellos abren. Abren la conversación con un smiley o un hello. Pero otra cosa no quieren hacer: explicar sus intenciones? Detallar sus sentimientos? Cerrar, siquiera? Nah, ya está, basta, dicen. Bastante con el rol activo sexual (del cual una duda también, pero eso es una, que es una reverenda maldita) que también tengo que tomar un rol activo en la pareja? Pobres, no te da cosa ahora? No te dan ganas de decirles, vení, vení que te cuido, y te explico lo que es el yo, el superyo y el ello? A mí sí. Ay, ya se me pasó. En fin, fue bueno mientras duró.
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